Efecto del comportamiento agresivo en un niño
Un estudio de 1998 de la Universidad Johns Hopkins señala
que la agresividad en los niños de primer grado puede llevar a que actúen de la
misma forma en la escuela intermedia. Si no se ayuda a detener esa conducta, la
agresión empeora con los años y sigue siendo frecuente en el aula. Por otra
parte, los problemas de fondo relacionados con este comportamiento, como ira,
hostilidad, frustración y baja autoestima, sólo empeoran a medida que pasan los
años, y esto perpetúa un ciclo vicioso de sentimientos negativos y conducta
agresiva.
Pérdida del control en el aula
Cuando los profesores no actúan con rapidez y eficacia para
detener el comportamiento agresivo de un alumno, pueden perder el control de
toda la clase. Algunos estudiantes podrían encontrar ese comportamiento
molesto, pero otros lo verán como una oportunidad para actuar de la misma
manera. Esto puede ser especialmente problemático debido a que el profesor no
va a ser capaz de enseñar, y el resto de los estudiantes no podrá aprender. Por
otra parte, la violencia en las escuelas y el comportamiento dañino siguen en
aumento.
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